“Voy en busca de un Gran quizá.” Éstas son las últimas
palabras que nuestro protagonista recuerda a cada momento. Miles Halter, un
chico solitario y sin amigos, busca cambiar su aburrida vida y decide terminar
sus estudios en Culver Creek, el mismo internado en el que estudió su padre.
Allí, su nuevo compañero de cuarto se convierte en uno de sus mejores amigos,
él, junto con Alaska y Takumi, le muestran un nuevo mundo de libertad y
travesuras. Miles empieza a vivir su vida y a buscar su Gran quizá, pero unas
nuevas últimas palabras cambian un poco su percepción del mundo, las de Simón
Bolívar: “¿Cómo voy a salir de este laberinto?”
Como siempre John Green nos entrega una obra hermosa,
dolorosa e interesante que nos enseña muchas cosas sobre la vida.
Hay muchos personajes encantadores cómo el profesor de Religión,
un anciano que guía a Miles a encontrar la respuesta a un gran acertijo.
La amistad y la fidelidad son factores importantes en este libro,
con el dilema de Culver Creek “No ser el soplón”, nos encontramos con grandes
misterios y problemas.
Miles encuentra personas que lo aceptan, lo quieren y
comparten con él. Su vida va cambiando, experimenta cosas nuevas, le gustan
nuevas personas y por fin empieza a vivir como un verdadero adolescente… todo
es color de rosa hasta que un inesperado giro afecta su vida y la de sus amigos.
Siendo muy ingenioso John nos narra la vida de un chico al
que no le importa lo que digan de él, que nos enseña lo bueno que es la vida y
lo importante de vivirlo. Teniendo en cuenta de que es la primera novela de
éste ya famoso escritor, nos demuestra que es un narrador muy bueno y que tiene
una maestría impresionante.
Es un libro que se disfruta, que te deja pensando sobre cuál
es el laberinto y si alguna vez podremos salir de él. Para mí es una excelente
obra que seguro amarán y está totalmente recomendada.
Los personajes tienen vidas difíciles pero todos te enseñan algo, en especial Alaska, la chica
más misteriosa que he leído en mucho tiempo. Siendo sexy y chistosa se podría decir
que llama mucho la atención y que es malgeniada, pero tiene sus razones.
Este libro vuelve a romper mi corazón, y aunque no cumplió
mis expectativas es bastante bueno como ya he dicho. Merece ser leído.
Buscando a Alaska, un libro que simplemente demuestra el
paradigma que es la vida y lo difícil que es solucionarla.
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